La estimulación en casa por parte de los padres a sus hijos es fundamental para un buen desarrollo. Partimos de que la mayor parte del tiempo o lo pasan en el colegio (si ya está en edad escolar) o con sus padres el tiempo restante. Por ello es importante no dejar pasar esta oportunidad para poder ofrecerle a nuestros hijos lo mejor que le podemos dar, que es ofrecerle un entorno bueno y adecuado para fomentar su correcto crecimiento y neurodesarrollo.
Tanto los niños que tienen dificultades en el área del lenguaje como niños que no presentan ninguna dificultad, es importante fomentar el juego con sus padres para aprender de manera lúdica, ya que un aprendizaje de manera lúdica es un aprendizaje significativo, siendo más fácil de adquirir y generalizar por parte del niño.
Además, el juego reporta una serie de beneficios para el niño como son el fortalecimiento de lazos afectivos con sus padres, transmisión de conocimientos, aportando seguridad, autoestima y contribuir a su felicidad. Así el niño aprende mientras se divierte.
A través del juego se pueden mejorar muchas áreas como la psicomotricidad, lógica, números, entrenamiento de la memoria, habilidades viso perceptivas, además de ser un buen instrumento para estimular el área del que os queremos hablar hoy, que es el lenguaje.
El lenguaje es un área muy importante en cuanto al desarrollo de un niño. Es la base del pensamiento y del aprendizaje, y un instrumento para poder expresar lo que sentimos, nuestras ideas o pensamiento. Comenzamos a desarrollar el lenguaje en el momento en el que nacemos. Así todas las manifestaciones que observamos en un bebé antes de que emita sus primeras palabras son parte de ese desarrollo: por ejemplo, si nos fijamos en los bebés, la mayoría con unos meses ya empiezan a emitir sonidos y a balbucear o llorar, siendo está la denominada etapa prelingüística.
El ser humano aprende o adquiere conocimientos o destrezas en base a experiencias y por estímulos del entorno, ya que si un bebé está asilado desde que nace hasta años después no adquirirá lenguaje (podemos hablar del caso del niño de Aveyron) ya que uno de los requisitos para el correcto desarrollo del lenguaje es la estimulación del bebé con el entorno. El desarrollo del lenguaje solo se adquiere de manera correcta y eficaz a partir de las experiencias que el ser humano desde bebé adquiere por la interacción con el mundo que le rodea y con las personas de su entorno, convirtiéndose sus padres en los primeros años de vida en una importante fuente de estimulación.
Por ello a continuación os exponemos una serie de juegos que ayudaran a estimular el lenguaje desde pequeños. Los dividiremos en franjas de edades (meses en este caso):
Desde los primeros meses:
Importante la estimulación a nivel multisensorial: por ello es importante darle al niño juguetes que estimulen sentidos como: el auditivo, visual o táctil. Así son interesantes juguetes como: sonajeros, mordedores, pelotas sensoriales, libros de texturas, alfombras sensoriales…
Desde los 12 meses a los 24 meses:
En esta franja de edad ya el bebé suele emitir alguna palabra, además ya tendrá la capacidad de atención conjunta, habilidad que ayudará a que se pueda interaccionar con él de manera óptima.
Por ello será importante tener juguetes como los siguientes:
- Puzles con piezas grandes para ir adquiriendo vocabulario y habilidades visoperceptivas.
- Juegos en los que tengan que emitir sonidos, como por ejemplo animales de la granja y poder relacionar cada nombre con el animal correspondiente o con el sonido que emite cada animal.
- Además, podremos leerle cuentos sencillos, para fomentar atención, comprensión oral del lenguaje, y aumento de conceptos y desarrollo de vocabulario.
- Juegos de encajar formas o colores, para fomentar el desarrollo de conceptos y comprensión de órdenes sencillas como: “dame color verde”, siempre adaptándose al niño, a sus conocimientos.
De los 24 meses a los 36 meses:
- Ya podremos incrementar la “dificultad” o complejidad de los juegos, ya que ya suele aparecer el juego simbólico; por lo que ya podremos jugar a con coches, muñecas, etc.
- También podemos jugar con un teléfono cada uno y hacer que estemos hablando por el con su padre o con su madre (el que no esté presente en ese momento) u otro familiar con el que tenga contacto frecuente.
- Juegos de memoria: por ejemplo, juegos tipo “memory”, de hacer parejas, buscar parejas.
- Juegos de dominó infantil: para fomentar la atención, desarrollar el vocabulario, etc.
- Jugar a aprender canciones sencillas y adaptadas a su edad o necesidades: esto ayudará a desarrollar la memoria, atención, ampliación de vocabulario, conciencia de estructuras sintácticas correctas, etc.
- Juegos de construcciones con piezas grandes ( a partir de los 36 meses), para fomentar su creatividad, imaginación, psicomotricidad, y lenguaje si se usan con turnos de juego:; por ejemplo: “ dame la pieza de color roja” ( estaremos fomentando la atención y la comprensión de órdenes), o cada pieza que ponemos vamos a decir el nombre de un animal (estaremos jugando pero a la vez estimulando y desarrollando vocabulario).
Por ello es importante aprender divirtiéndose y siendo felices, disfrutando de cada momento con sus hijos para que además de estimular el lenguaje, crezcan en un ambiente de felicidad y así también poder desarrollar su parte afectiva.